Mª Amparo me conoció hace pocos meses. Cuando ella supo a lo
que me dedico, enseguida pensó que sería un bonito regalo para sus queridas
nietas en un día tan señalado como su cumpleaños. Se acercaba la fecha y
hablamos de las cosas que más le gustaban y de sus colores favoritos. A Emma la
compara con un arcoíris con la diversidad de colores que este tiene y así lo
refleja en su dedicatoria, preciosa donde las haya. Unas palabras que la niña
siempre tendrá presente cada vez que abra su caja y recordara que su abuela se
la regalo con tantísimo cariño. Gracias Mª Amparo es un placer el haberte conocido.
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